Una gran operación
Con casi 2.000 jugadores y cuatro equipos AAA, la Asociación se ha convertido en una parte importante de la comunidad. Matt Bestland dice que empezó a implicarse en la asociación cuando sus hijos jugaban al hockey, luego pasó algún tiempo en la Junta Directiva y ahora es el Director.
«Me ocupo de los cuatro equipos de la AAA, me aseguro de que el gobierno de la junta que me asiste en las operaciones cotidianas cumpla las normas, y me ocupo de cualquier disputa que tengan los padres o los jugadores», explica Matt.
Hay más de 100 equipos en la región, con jugadores de edades comprendidas entre los 5 y los 18 años, y se necesita un gran esfuerzo de mucha gente para que todo funcione a la perfección.
«Contamos con una gran base de voluntarios en toda la región, y tenemos cientos de voluntarios que donan su tiempo y su experiencia», afirma Matt.
Creación de equipos mediante el servicio comunitario
Fuera del hielo, los equipos son conocidos por devolver algo a sus comunidades.
«Como director, una de mis prioridades es que los equipos y los jefes de equipo puedan identificar y apoyar causas cercanas y queridas para sus corazones y sus comunidades. El voluntariado y la retribución son sin duda un ejercicio de creación de equipo. Uno de los principales objetivos de nuestra región es animar a los niños a que se involucren en el hockey y también a que se conviertan en buenos ciudadanos y buenas personas que ayuden a los que les rodean», explica Matt.
Algunos equipos han sensibilizado y recaudado fondos para hospicios locales, el tratamiento del cáncer de mama y la salud mental. Otros han dedicado su tiempo a apoyar bancos de sangre y despensas de alimentos.
«Uno de nuestros equipos femeninos de la AAA hizo una campaña de recogida de alimentos en la que jugadoras, padres y aficionados podían venir gratis al partido, siempre que trajeran un alimento no perecedero. Ese partido recaudó tres cajas enormes de alimentos que se donaron a uno de los bancos de alimentos de nuestra región», cuenta Matt.
Enfoque integrador
De cara al futuro, Matt dice que la Asociación quiere continuar algunos de sus esfuerzos que han tenido que pausar debido a la pandemia.
«Nos gustaría centrarnos más en aumentar las inscripciones de hockey en las ligas femeninas y otros grupos infrarrepresentados de nuestra región. Antes de la pandemia, organizamos eventos para aprender a patinar que hicieron subir mucho nuestras inscripciones femeninas», explica.
Calcula que de los casi 2.000 jugadores, alrededor del 30% se identifican como mujeres, y que los eventos anteriores de Learn to Skate ayudaron a introducir el deporte a cualquier persona interesada.
«Queríamos asegurarnos de que nadie se sintiera tímido o temeroso de entrar en el hielo, así que animamos a todos los interesados a que lo probaran», afirma.
También fue útil para los padres que querían saber más sobre el deporte y cuál sería el compromiso de tiempo. Con el objetivo de ser más inclusivos, Matt dice que están invitando a más gente a probar suerte en el hielo.
«También queremos animar a los nuevos canadienses a que conozcan mejor el hockey. Puede que no hayan tenido una introducción a este deporte o que no estén muy familiarizados con él. Celebramos actos para mostrarles el deporte y darles más información sobre dónde aprender a patinar y cómo inscribirse si querían jugar», explica.
De cara a 2022 y 2023, Matt y la Pembina Valley Minor Hockey Association agradecen el apoyo recibido, y esperan relanzar sus programas Learn to Skate tan pronto como sea seguro.
«Agradecemos mucho el apoyo de nuestros patrocinadores, que nos ayudan en estos esfuerzos por enseñar el hockey a los miembros de la comunidad y a seguir impartiendo estos programas», afirma.
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