Puede parecer que esa cría de pájaro o conejo en el jardín ha sido abandonada por sus padres, pero lo más probable es que no sea así.
Cuando se trata de la vida salvaje, Chantal Theijn, del Refugio Hobbitstee de Jarvis (Ontario), dice que es importante no antropomorfizar a los animales salvajes. Chantal fundó el Refugio en 2007 con modestas ambiciones y desde entonces lo ha convertido en un importante recurso para la rehabilitación, educación, mitigación e investigación de la fauna salvaje.
«La fauna salvaje es salvaje por definición, y no se puede medir con los mismos criterios con que medimos a nuestros perros y gatos», afirma Chantal. «Es peligroso antropomorfizar la fauna salvaje porque, a diferencia de perros y gatos, no está domesticada. Quiero que la gente sea consciente de la naturaleza salvaje de la fauna y de la necesidad de que sean salvajes».
Más mal que bien
Cuando alguien ve una cría de animal sola, quiere salvarla y cuidarla, pero Chantal dice que eso puede ser perjudicial para el animal.
«Si las crías no se alimentan y crían adecuadamente, pueden arruinar el resto de sus vidas. Cosas como la enfermedad ósea metabólica y la falta de ciertos nutrientes en su dieta causan muchos problemas, de forma muy parecida a como ocurriría en un ser humano.»
Dice que lo más probable es que el bebé haya sido separado temporalmente de su madre, no abandonado.
«Los animales -como los humanos- no se apresuran a abandonar a sus crías. Ahora es temporada de ciervos bebé. Los cervatillos tienen fama de que las madres los dejan solos durante largos periodos de tiempo, y es muy difícil convencer a la gente de que deje a los cervatillos tranquilos. Por desgracia, muchas crías de animales salvajes son retiradas por error porque la gente cree que han sido abandonadas.
Chantal dice que es preferible reunir o acoger a una cría y llevarla al centro de rescate de animales salvajes sólo si está herida o enferma. Puede leer más sobre el proceso de reunificación en su blog.
La expansión está en el horizonte
Chantal y su equipo de voluntarios están siempre ocupados. Más de 3.000 animales salvajes llegan al refugio cada año.
«Nuestra función principal es rehabilitar animales salvajes enfermos, heridos y huérfanos, sobre todo los que están en peligro por culpa de los humanos. Intentamos devolver a la naturaleza a todos los que podemos. También trabajamos con otros organismos para ayudar a identificar y mitigar zonas muy problemáticas, como tramos de carreteras donde las tortugas suelen ser atropelladas por vehículos.»
Chantal dice que su equipo se está quedando sin espacio, pero están trabajando en un plan para ampliarlo.
«Queremos rehabilitar más animales, pero nuestro edificio no es lo bastante grande para acoger a más voluntarios. La ampliación también nos permitiría tener recintos exteriores más grandes y mejores para los animales salvajes. Pero algo que siempre he querido es tener un laboratorio in situ. Las enfermedades de los animales salvajes suelen pasarse por alto y siempre tenemos problemas con los laboratorios existentes. Podría servir para investigar y conocer mejor la prevalencia de ciertas enfermedades en la zona».
A medida que disminuyan las restricciones a las reuniones, Chantal espera reanudar los actos de recaudación de fondos para que el equipo de Hobbitstee pueda seguir educando y concienciando sobre la importancia de mantener la vida silvestre en su hábitat natural.¿Le interesa saber más sobre el Refugio de Vida Silvestre Hobbitstee? Siga su página en Facebook o suscríbase a su boletín de noticias para estar informado. También puede seguir el blog de Chantal haciendo clic aquí.