La tercera fase de la que será la mayor instalación de energía eólica de Nuevo México está en construcción desde el otoño y se prevé que abra sus puertas a finales de la primavera o principios del verano.
El proyecto de 81 aerogeneradores en Grady, a unos 32 kilómetros al norte de Clovis, remata las instalaciones de Broadview Wind, donde en 2017 entraron en funcionamiento dos fases anteriores con 141 aerogeneradores.
«Nuevo México cuenta con excelentes recursos para la energía eólica y solar», afirma Adam Renz, director de asuntos externos de Pattern Development, empresa internacional de generación de energía eólica con sede en Houston.
Cuando esté terminada, la planta de Broadview generará 544,8 megavatios, electricidad suficiente para abastecer a unos 225.000 hogares, según Renz.
Pattern Development vende la energía generada en las dos primeras fases de Broadview a Southern California Edison en Los Ángeles, y la energía de la fase Grady se venderá a Sacramento Municipal Utility District en California, dijo Renz.
Broadview no seguirá siendo durante mucho tiempo el mayor productor eólico de Nuevo México. Pattern Development tiene previsto iniciar la construcción a finales de este año o principios de 2020 de una instalación de 2.000 megavatios cerca de Corona, con torres de turbinas en los condados de Lincoln, Torrance y Guadalupe, según Renz.
Pattern Development tiene 27 instalaciones de generación eólica en Estados Unidos, Canadá y Japón, con intenciones de expandirse a México.